Lleno de público, esta vez sobre las tablas de la Giralt Laporta

La gran interpretación de Riccardo Rigamonti, único actor en escena elevó el sentido y calidad de ‘Kolhlhass’, la obra que, en ausencia de decorados, música y demás recuerdos, brinda la magia del teatro libre para evocar espacios, personajes y emociones que toman vida de modo tan distinto en la menta e imaginación de cada espectador.

Compartido, emocionante, libre. El teatro se hizo realmente experiencia inolvidable para los asistentes a la representación de ‘Kohlhass’, la obra que lleva a las tablas el relato original de Heinrich Von Kleist inspirado en un hecho real, ocurrido en Alemania en el XVI, pero que, puesto bajo los focos, sigue cobrando plena vigencia, buscando repuestas sobre la justicia. Solo, sentado en una asilla, el único actor en esta función, Riccardo Rigamonti, asume magistralmente, como bien lo probó en la noche del 30 de noviembre a su paso por Valdemorillo, la fuerza del texto, el sentido del montaje, bastándole para ello su cuerpo, su voz… como expresión del teatro narrativo, libre, ausente de escenografía y cualquier otro recurso que nos sea esa formidable capacidad para la evocación de los espacios y los personajes a cargo de un intérprete que sabe, además, cómo llenar el escenario de público implicado, del espectador del todo partícipe. Una mágica velada teatral para recordar al criador de caballos, recto y observante de la ley, que víctima de la corrupción, la prepotencia, llega a convertirse en bandido y artífice de una revolución.

Incluida entre las apuestas especialmente originales que llevan sello de la Red de Teatros de la Comunidad de Madrid, esta representación respondió a lo esperado por la Concejalía de Cultura, responsable de su programación en Valdemorilo, subrayando ese vínculo clave entre actor y espectador que, en ocasiones como ésta, cobra en la práctica pleno protagonismo. Porque el texto de Marco Baliani y Remo Rostagno, y también la dirección a cargo de María Gómez, todos y cada uno de los ‘ingredientes’ de esta actuación supieron darle su toque para presentarla realmente diferente, única, y más que emocionante, disfrutando del actor entregado a su verdero papel, el Teatro en esencia, el que se vive con entrega y pasión para hacerlo vivir, al máximo, a todos los demás.